Los objetivos principales de la Psicología consisten en describir, explicar, predecir y modificar la conducta humana. Son numerosas las actividades del psicólogo encaminadas a cubrir las necesidades que pudiesen surgir de cualquiera de estos objetivos.
En la consulta psicológica, las necesidades pueden ser de muchos tipos y por diferentes motivos. Por citar algunos ejemplos, alguien puede querer que se evalúen y valoren sus habilidades cognitivas, otra persona podría buscar asesoramiento u orientación sobre estudios para sus hijos o acudir a consulta con el objetivo de mejorar su relación con su pareja, así como tratar, por ejemplo, problemas de ansiedad o del estado de ánimo…
Pero hoy nos gustaría detenernos en la modificación de la conducta. De entrada decir que la conducta de la persona debe cambiar cuando su comportamiento actual está adquiriendo el carácter de problema psicológico.
Los problemas de la vida de una persona pueden dar lugar a malestar, disfunciones vitales, problemas adaptativos, etc. Las personas normalmente consiguen solucionar estos aspectos y disminuir el malestar o la interferencia que pueden provocar en su vida. Sin embargo, en ocasiones no disponen de las herramientas necesarias para lograrlo o aun disponiendo de los recursos necesarios, no consiguen ponerlos en marcha. O directamente los niveles de malestar son tan elevados que la persona se ve bloqueada. Es entonces cuando hablamos de problemas psicológicos.
Por lo tanto, cuando una persona considere que no es capaz de modificar su forma de pensar o de sentir o cuando su conducta le está producción malestar, disfunción o interferencia en cualquier área de su vida, debería plantearse la existencia de un problema psicológico. En nuestra web se recoge un listado de estos problemas, agrupándolos en diferentes categorías que tendrían como fin básico el entendernos entre especialistas y con los consultantes.
Deja tu comentario