Trastornos del sueño:

250shutterstock_42809506Una de las funciones básicas de nuestro organismo es mantener un equilibrio entre el estado de vigilia y el de sueño, estados alternativos de la conciencia. El dormir bien es una actividad fundamental para la persona. Sabido es que el llamado sueño NMOR es fundamental para la “recuperación física” como el MOR lo es para la “recuperación psicológica”. Si alguno de los dos tipos de sueño se alteran la persona pueden quejarse de importantes problemas físicos (cansancio, dolores musculares…) o psicológicos (ansiedad, falta de atención, irritabilidad…) Y sabido es que los problemas de sueño son de los que más se consultan en Atención, y esto en las diferentes edades (ver sección de Niños y Adolescentes).

Se suelen distinguir dos tipos de trastornos del sueño: Disomnias (trastornos en la cantidad,  calidad e inicio del sueño) tales como insomnio, hipersomnia, narcolepsia, apnea obstructiva, síndrome de piernas inquietas, jet lag…, y Parasomnias(trastornos relacionados con el contenido o la conducta durante el sueño) tales como somniloquia, sonambulismo, terrores nocturnos, pesadillas, bruxismo, enuresis…

NUESTRO TRATAMIENTO:

Especialmente en relación con las disomnias, tras la evaluación detallada de la problemática presentada por el paciente, seguramente después de una valoración y/o intervención médica), se planteará una intervención psicológica que conllevará, entre otros, los siguientes objetivos:

-Estrategias encaminadas a una buena higiene del sueño (alimentación, pautas horarias…).

-Técnicas de relajación para conseguir las condiciones fisiológicas adecuadas.

-Control estimular  para poder conseguir una ambiente adecuado.

-Técnicas para el control de pensamientos negativos y preocupaciones para lograr una desactivación cognitiva.

-Condicionamiento estimular a situaciones que desencadenen por sí mismos el sueño y conseguir ese automatismo.