A veces parece que el mundo se pone en tu contra : tu hermana quiere que cuides de tus sobrinos, tu jefe que te quedes hasta tarde en el trabajo, tu amigo que le dejes dinero….si estas situaciones te resultan familiar tienes la solución, decir que NO.

Aprender a decir NO es uno de los principales objetivos de las personas que se interesan por la asertividad. Hay personas que sufren mucho cuando tienen que negarse a hacer o decir algo que va en contra de lo que quieren. A la vez, esta es la destreza en la que más se equilibran el respeto hacia uno mismo con el respeto hacia la otra persona, porque a las personas que utilizan respuestas agresivas les resulta muy fácil decir NO de manera invasiva y poco considerada hacia el otro. Por el contrario, a las personas sumisas les cuesta mucho respetar sus propios criterio y decir NO a costa de que el otro se enfade con ellos.

Las personas que saben decir NO lo hacen inconscientemente , sin plantearse más que : “¿lo quiero- no lo quiero?” y ven ese decir NO como una sola acción: no quieres algo- dices que no. Sin embargo están emprendiendo, sin darse cuenta toda una serie de pasos cognitivos y conductuales.

Para aprender a decir NO adecuadamente tenemos que identificar cuales son esos pasos, ver como podemos desarrollarlos y finalmente automatizarlos, de manera que a la larga nos salga espontáneamente.

Decir NO es una habilidad, y al ser una habilidad se trata de un comportamiento aprendido, aunque haya determinadas características de personalidad que pueden facilitarnos el aprendizaje (ej: las personas extrovertidas adquieren más fácilmente esta habilidad), así que todos podemos practicar y mejorarlo.

Por todo esto, te invitamos a que empieces a ponerlo en práctica en tu día a día, sobre todo en las pequeñas cosas cotidiaas, y que nos comentes qué dificultades o beneficios has encontrado.